A tiempo

15:56 y me siento a esperar que la luz salga del túnel y el tren arribe. El reloj dice que demorará al menos 04:04 y yo aprovecho para pensar en ella, la primera mujer a quien amé aunque el amor a esa edad no estuviera bien identificado (vaya uno a saber si ahora si). Ahora mismo, ella, en Miami, abre la nevera, saca un vaso de yogurt, se lo entrega a su hija de dos años como desayuno y se acuerda de mi, acaba de ver en su portátil que la agregué a facebook, me recuerda en el balcón, llamándola a gritos, contando hasta 30 para salir a buscarla, aprendiendo a besar en el callejón de los muertos, justo debajo... del palo de mangos. 15:57 y mi madre se alista para ir al trabajo, ya hizo gimnasia, desayunó, escucho la noticia de los 506 doctores en el Chocó y dejó a Mario en el trabajo. 15:59 y mi amiga rompe el capitulo tres de la radio novela en Timor del Este, a pesar de su actitud los chicos siguen embalados, hablando en su lengua, ella se hala los pelos y se queda con varios en la mano pero cambia la lagrima por sonrisa... desde la ventana ha visto volar una ballena. 16:00 y el puto metro nada que pasa, trato de relajarme un poco pero el cuerpo me arde como nunca, el morbo por encontrar una playa nudista me hizo caminar mas de la cuenta y tal vez aquí el sol no se ponga nunca vertical pero de que quema, quema. 04:53 pm, ni a mi portátil ni a mi nos gusta la hora militar, el MSN se conecta solo y un viejo amigo que vive en Bogotá, acompaña su nickname con un texto que dice: -“esta noche en Killa”- -“sabroso!” - Le escribo yo... -“sabroso tu allá”- me responde él.

No comments: