Sobre mi pecho


Te veo revolotear, te veo cantar, bailar, saltar. Tienes ese pelo engajado, esas piernas divinas. Te veo y me veo. Tú con ese vestidito amarillo, y yo con esta cara de idiota, cada vez más viejo. Hoy te has puesto las sandalias que yo mismo te he comprado. Te veo y no me miras, te miro en silencio. Te miro saltar en mi cama, jugando a las escondidas. Mi cama es tu escondite, tu guarida, tu lugar de ilusión. Te siento construyendo historias sobre mi pecho, riendo con las cosquillas que te hago, y de pronto como si nada, desapareces. Te vas sin despedirte, mientras me sacas una sonrisa. Me gustaría sentarme a enseñarte cosas, a aprender de ti. Reirme de nosotros, solos, quedarnos dormidos. Te veo inocente y risueña, fuerte y traviesa, te miro y me miro, te cuento y me cuento, te espero y espero.

Si Esperanza me viera, pfff... vaya problema. Si me viera pensando en ti. Esperanza se pondría celosa y nerviosa. Pero si Esperanza te viera, como yo te veo, reconocería que tu tienes un pelo más lindo, unos ojos preciosos, el color perfecto y toda una vida por delante. Si me viera en este estado... meditabundo, imaginándote bailar, disfrutando de tu coquetería, tu dulzura, tu sonrisa, entendería porque me pongo tenso cuando te pienso. Al fin y al cabo, por mas que se parezcan, Esperanza es Esperanza y tu eres Mikaela.  

2 comments:

Ema del Bosque said...

wow! Me encantó.

Unknown said...

gracias!!! vuelve..